La enfermedad de Graves es un trastorno autoinmune. Se dirige a la tiroides, lo que provoca hipertiroidismo o hiperactividad tiroidea. El tiroides, una pequeña glándula situada en el cuello, desempeña un papel fundamental en la regulación del metabolismo y la energía.
Cuando la enfermedad de Graves afecta a su tiroidesCuando la tiroides se debilita, empieza a producir hormonas tiroideas en exceso, lo que puede tener efectos muy variados en el organismo. La detección precoz de los síntomas es importante para obtener un diagnóstico preciso y comenzar un tratamiento que pueda ayudarle a sentirse mejor y evitar complicaciones en el futuro.
¿Qué es la enfermedad de Graves?
Enfermedad de Graves se produce cuando el sistema inmunitario ataca por error al tiroides, provocando que produzca demasiada hormona. Este exceso hormonal acelera muchos de los procesos corporales. A su vez, esto provoca una serie de síntomas que pueden afectarlo todo, desde sus niveles de energía hasta su peso e incluso su estado emocional.
La enfermedad de Graves es especialmente frecuente entre las mujeres de 30 a 50 años. Sin embargo, puede afectar a cualquier persona. Si conoce la enfermedad, estará un paso más cerca de reconocer los síntomas en usted mismo o en un ser querido.
Síntomas comunes de la enfermedad de Graves
Síntomas de la enfermedad de Graves pueden variar, pero hay síntomas físicos, oculares y emocionales comunes a los que hay que prestar atención. A continuación, exploraremos lo que puedes experimentar con esta enfermedad.
Síntomas físicos
Los síntomas físicos pueden variar mucho de un paciente a otro con enfermedad de Graves. Pueden ir desde una sensación de cansancio constante hasta latidos cardíacos acelerados sin realizar ningún esfuerzo físico.
Pérdida de peso
Aunque sienta hambre constantemente y coma más de lo habitual, es posible que experimente una pérdida de peso inexplicable. Esto se debe a que la tasa metabólica de su cuerpo está en sobremarcha debido al exceso de hormonas tiroideas, haciendo que queme calorías rápidamente.
Latidos cardíacos rápidos (palpitaciones)
Es posible que tenga la sensación de que el corazón se le acelera o le late con fuerza en el pecho, incluso en reposo. Estas palpitaciones son un signo de que su sistema cardiovascular está trabajando más de lo habitual, lo que puede provocar otros problemas de salud si no se controla. Tenga en cuenta que las palpitaciones pueden ser síntomas de otras enfermedades, por lo que es muy importante un diagnóstico preciso.
Fatiga y debilidad muscular
Enfermedad de Graves a menudo agota su energía, lo que le dificulta seguir el ritmo de las actividades cotidianas. Puedes sentir una fatiga extrema y notar debilidad muscular, sobre todo en brazos y piernas. No se trata sólo del cansancio habitual. Puede afectar a su calidad de vida de forma importante.
Síntomas relacionados con los ojos
A medida que la enfermedad de Graves avanza, empieza a afectar a muchas zonas del cuerpo. Uno de los signos "clásicos" de la enfermedad son los ojos saltones, pero hay otros síntomas a los que hay que prestar atención en este caso.
Ojos saltones (exoftalmos)
Uno de los signos reveladores de la enfermedad de Graves es el exoftalmos, en el que los ojos parecen sobresalir. Esto ocurre porque la respuesta inmunitaria provoca una inflamación de los músculos y tejidos que rodean los ojos, lo que afecta a la visión y modifica la mirada.
Irritación ocular y sensibilidad a la luz
Es posible que sienta molestias cuando esté expuesto a una luz intensa o al aire libre, ya que sus ojos se vuelven más sensibles. También puede notar enrojecimiento, sequedad o sensación de arenilla en los ojos, lo que le obliga a parpadear más a menudo o a llevar gafas de sol para aliviarse.
Síntomas emocionales y cognitivos
Los síntomas de la enfermedad de Graves no son sólo físicos. La enfermedad también puede afectar a tu estado mental y emocional.
Ansiedad e irritabilidad
El exceso de hormona tiroidea puede afectar a tu estado de ánimo y mental, haciéndote sentir ansiosa o irritable sin motivo aparente. Es fácil pasar por alto estos cambios porque también forman parte de muchas otras afecciones, como la premenopausia, la menopausia y la perimenopausia. Sin embargo, son signos comunes de desequilibrio hormonal causado por la enfermedad de Graves.
Dificultad para dormir
Con todos estos cambios físicos y mentales, puede resultarle difícil dormir bien. El insomnio o las noches inquietas pueden volverse frecuentes, ya que su mente y su cuerpo están constantemente "encendidos", lo que agrava aún más su fatiga. Es posible que tampoco padezca el insomnio "clásico". Algunas personas no tienen problemas para conciliar el sueño, pero les cuesta permanecer dormidas, o pueden notar que incluso los ruidos más pequeños las despiertan.
Variabilidad de los síntomas de la enfermedad de Graves
Uno de los aspectos más difíciles de la enfermedad de Graves es que los síntomas pueden variar mucho de una persona a otra. Algunas personas solo experimentan síntomas leves, mientras que otras se enfrentan a efectos graves.
Esta variabilidad hace que sea importante estar atento a cualquier cambio en su salud, especialmente si tiene factores de riesgo como antecedentes familiares de problemas de tiroides. En pocas palabras, presta atención a lo que ocurre.
Si bien no debe asumir que el insomnio temporal o la fatiga ocasional son signos de la enfermedad de Graves, tampoco debe achacarlos al proceso de envejecimiento o al estrés si son persistentes.
Cuándo buscar atención médica para los síntomas de la enfermedad de Graves
Si padece fatiga persistente, cambios significativos de peso, problemas oculares u otros síntomas mencionados anteriormente, es hora de consultar a un profesional sanitario. Incluso si no está seguro de cuál es la causa de estos problemas, acudir a un médico puede conducir a un diagnóstico y tratamiento tempranos, lo cual es esencial para gestionar eficazmente la enfermedad de Graves. Las revisiones periódicas y la gestión proactiva son cruciales, sobre todo si tiene otros factores de riesgo.
Comprender la importancia del diagnóstico precoz para el tratamiento
Reconocer a tiempo los síntomas de la enfermedad de Graves puede ayudarle a evitar posibles complicaciones, como problemas cardíacos u oculares. Si detecta la enfermedad a tiempo, tendrá más opciones de tratamiento y podrá tomar el control de su salud antes de que los síntomas sean más difíciles de manejar. También es importante para prevenir daños permanentes, como la pérdida de visión. Una actitud proactiva y un tratamiento preventivo pueden ayudar a ralentizar, detener o incluso revertir algunos síntomas.
Dé el siguiente paso hacia el alivio
Si experimenta alguno de estos síntomas y desea la opinión de un especialista, póngase en contacto con el Dr. Raymond Douglas para una evaluación exhaustiva. Él se especializa en la enfermedad de Graves y puede guiarlo hacia un plan de tratamiento que se adapte a sus necesidades. No espere para obtener alivio-Programe una consulta con el Dr. Douglas hoy mismo y dé el primer paso para controlar sus síntomas y mejorar su calidad de vida.
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