¿Estás luchando contra la enfermedad ocular tiroidea (EOT)? Puede ser una enfermedad dolorosa y atemorizante, pero hay esperanza. Con los cuidados adecuados, puede ralentizar su progresión o incluso detenerla.
Conocer las fases del tiroides enfermedad ocular es clave para controlar los síntomas y saber cuándo recibir tratamiento. Al saber en qué punto del proceso de la enfermedad se encuentra, podrá comprender la importancia de un diagnóstico precoz, de unos cuidados suaves y el valor de trabajar con un especialista como el Dr. Raymond Douglas.
La enfermedad ocular tiroidea se produce cuando el sistema inmunitario del organismo ataca los músculos y tejidos que rodean los ojos, provocando inflamación y cambios en el aspecto y el funcionamiento. Conocer las fases de la enfermedad ocular tiroidea ayuda a pacientes y cuidadores a identificar los síntomas y a comprender cuándo intervenir y controlar la enfermedad.
Explicaremos las etapas de enfermedad ocular tiroidea para que las personas con DET y sus cuidadores puedan saber en qué fase se encuentran. También hablaremos de por qué es importante recibir atención en todas las etapas, pero especialmente durante la etapa activa, cuando la intervención temprana es clave.
¿Qué es la enfermedad ocular tiroidea?
La oftalmopatía tiroidea es una enfermedad autoinmune que provoca inflamación, hinchazón y cambios en el aspecto de los ojos. Suele asociarse al hipertiroidismo, en particular a la enfermedad de Graves, pero también puede darse en otras afecciones tiroideas. La DET pasa por etapas y los síntomas pueden variar de una persona a otra.
La enfermedad ocular tiroidea (EOT) pasa por dos fases principales: la fase activa (inflamatoria) y la fase inactiva (estable). Es necesario conocer ambas fases para controlar la enfermedad con eficacia, ya que los síntomas no tratados pueden llegar a ser graves y permanentes.
La fase activa (inflamatoria)
Durante la fase activa, el sistema inmunitario ataca el tiroides y los tejidos que rodean los ojos, y se produce la inflamación. Los síntomas alcanzan su punto álgido durante esta fase.
Síntomas en la fase activa:
- Hinchazón de los párpados
- Enrojecimiento e irritación
- Ojos saltones (proptosis)
- Visión doble
- Dolor o malestar
Los síntomas pueden desarrollarse de forma gradual o repentina y empeorar a lo largo de esta etapa, que puede durar de 6 meses a 2 años o más. El diagnóstico y el tratamiento precoces pueden reducir los síntomas y prevenir daños permanentes.
Por qué es importante un tratamiento precoz
Tratamiento precoz es clave para reducir la inflamación y prevenir complicaciones a largo plazo, como la pérdida de visión y los cambios estéticos.
Subetapas
- TED precoz (síntomas leves): Los síntomas son sequedad ocular, ligera hinchazón y enrojecimiento, que a menudo se confunden con problemas comunes como las alergias. Un diagnóstico y tratamiento precoces pueden prevenir síntomas más graves.
- TED intermedio (síntomas moderados): Se producen síntomas más pronunciados, como ojos saltones perceptibles, empeoramiento de la visión doble y aumento del dolor o la presión ocular. Tratamientos como los corticosteroides y la radioterapia tienen como objetivo reducir la inflamación.
- TED tardía (síntomas graves): Este estadio se caracteriza por un abombamiento grave, limitación de los movimientos oculares y posible pérdida de visión. Si no se trata, complicaciones graves como la compresión del nervio óptico pueden causar daños permanentes en la visión. Puede ser necesaria una intervención quirúrgica, como la descompresión orbitaria.
Etapa inactiva (estable)
Una vez que la inflamación remite, la DET pasa a la fase inactiva. No se producen nuevos daños, pero pueden persistir síntomas como ojos saltones y visión doble.
Síntomas en la fase inactiva:
- Ojos saltones residuales (leves)
- Visión doble
- Movimiento ocular limitado
Aunque la enfermedad es estable, los daños no tratados de la fase activa pueden causar complicaciones a largo plazo. La fase inactiva puede durar indefinidamente y los síntomas pueden hacerse permanentes.
Tratamiento en la fase inactiva
El tratamiento se centra en la rehabilitación y la corrección de problemas funcionales o estéticos. Pueden ser necesarias intervenciones quirúrgicas como la descompresión orbitaria, la cirugía de párpados o procedimientos para solucionar problemas de visión.
Por qué gestionar el TED en cada etapa
El tratamiento del TED requiere una estrecha vigilancia y un tratamiento oportuno en cada fase. La detección e intervención tempranas ralentizan la enfermedad, minimizan los daños y mejoran los resultados a largo plazo.
Si reconoce los síntomas a tiempo y busca tratamiento, tendrá más probabilidades de evitar complicaciones graves. Conocer las fases del TED puede ayudarle a saber cuándo actuar. Consultar a un especialista como el Dr. Raymond Douglas, experto en el tratamiento del DET, puede garantizarle la mejor atención posible para su enfermedad.
Infórmese y actúe con rapidez. Con el tratamiento adecuado, muchos pueden llevar una vida normal y activa.
Llame hoy a Raymond Douglas, MD
Si tiene DET o experimenta algún síntoma, póngase en contacto con la consulta del Dr. Raymond Douglas para concertar una cita.